Alirio Figueroa Zavala: Educación y desarrollo comunitario.
Individuo de número de la Academia de Ciencias Jurídicas del Estado Zulia.El individualismo es el freno a la solidaridad.
El individualismo es expresión de mezquindad, la antítesis del trabajo colectivo por el mejoramiento de los pueblos. El individualismo es un vicio que tenemos que erradicar de todos los pueblos, no solamente predicando la solidaridad humana, como una conducta que en lo práctico puede realizarse en beneficio de todos, sino divulgando su ejemplo para que sea esa manera de pensar y de ver a los pueblos la que derrote al individualismo, que es una enfermedad de la democracia, ajena a su realización.
Todo programa de desarrollo comunitario debe tener como base fundamental elevar las condiciones de vida del hombre; tiene como fin llegar a la justicia social o cooperar en su nombre, que es el objeto final de todos los desarrollos democráticos. Por lo tanto, la lucha por el desarrollo de las comunidades no se adopta en el equipamiento y construcción de infraestructura, ni en el ornato y enriquecimiento de las áreas en que habita el hombre marginado, sino que profundiza y lleva el hombre en lo que a él le corresponde como mentalidad y como individuo que actúa en la vida social, hasta los que a él acompañan formando las sociedades que reclaman un cambio fundamental en la distribución de la riqueza y en la propia concepción del trabajo y el papel del hombre en la comunidad.
No se trata aquí de estudiar la problemática del desarrollo de la comunidad de los esquemas pragmáticos realizables en obras y servicios fundamentales propuestos, sino que hay algo más profundo y más vital, como es la cooperación para la mentalidad de un hombre moderno, capacitado e informado para promover el desarrollo, para participar activamente en éste, para no ser objeto de paños calientes, sino de cambios fundamentales, de modo que él sea el protagonista de una nueva sociedad.
Entendemos a la educación como el instrumento para crear actitudes y posibilidades del hombre nuevo frente al reto de las realidades sociales políticas. Entendemos la educación como un proceso de formación integral de dar al hombre en su alma y en su espíritu lo que le falta para poder conquistar una situación social mejor. Sin educación no puede haber cultura, sin educación no puede existir conciencia progresista, sin educación no puede existir concepto de Nación, sin educación no puede existir solidaridad internacional, sin educación no puede existir conciencia al servicio de las transformaciones colectivas, sin educación no puede existir progreso y, por lo tanto, sin educación no puede existir desarrollo de la comunidad.
Por eso, realmente consideramos que todo proceso que tenga como finalidad la transformación de la sociedad, que todo programa que tenga por fin el mejoramiento del individuo, y a través de la suma de ellos, el de la comunidad, tiene que tener como base la educación creadora de una actitud para el progreso.
Alirio Figueroa Zavala
Individuo de número de la Academia de Ciencias Jurídicas del Estado Zulia