China podría aumentar compra de petróleo venezolano ante nuevos aranceles de EE.UU.
Expertos analizan cómo la guerra comercial Trump-China abre oportunidades para Venezuela en el mercado energético global
La reciente escalada en la guerra comercial entre Estados Unidos y China está generando ondas expansivas que podrían beneficiar a Venezuela en el estratégico mercado energético global. El economista Francisco Rodríguez, profesor universitario y analista de hidrocarburos, reveló un dato crucial: los nuevos aranceles de hasta 145% impuestos por la administración Trump a productos chinos no incluyen medidas específicas contra el petróleo venezolano, lo que crearía una ventana de oportunidad para PDVSA.
Este escenario se desarrolla en medio de lo que algunos analistas ya denominan “la segunda guerra fría comercial”, donde el anuncio del 15 de abril sobre los aranceles a China contrasta con el silencio sobre posibles “aranceles secundarios” al crudo venezolano. “La diferencia entre 145% y 170% es irrelevante cuando ambos son prohibitivos. Lo significativo es que China ahora podría ver menor riesgo en aumentar sus compras a Venezuela”, explicó Rodríguez durante una entrevista en Unión Radio.
- Resquicios legales: Las sanciones actuales de EE.UU. a Venezuela no prohíben explícitamente a terceros países comprar su petróleo, solo dificultan las transacciones en dólares. China, con su sistema financiero paralelo (CIPS), podría sortear este obstáculo.
- Historial de comercio encubierto: Entre 2019-2023, empresas privadas chinas como Zhuhai Zhenrong ya compraron crudo venezolano usando estructuras opacas y pagos en yuanes o trueques por productos manufacturados.
- Datos de producción reciente:
- Venezuela aumentó su producción a 1.048.000 bpd en marzo (OPEP)
- Capacidad ociosa de refinación china: 1.8 millones bpd (S&P Global)
- Precio actual crudo Merey: $61.10 (6% menos que febrero)
Expertos consultados señalan que la Compañía Nacional de Petróleo de China (CNPC), que evitó negociar con PDVSA por temor a sanciones secundarias, ahora podría involucrarse directamente. “El cálculo de riesgo cambió: si Trump castiga a China igual por acero o paneles solares, ¿por qué no comprar petróleo barato venezolano?”, cuestiona Li Wei, analista del Instituto de Estudios Internacionales de Shanghái.
El factor determinante podría ser Europa. Rodríguez sugiere que países como España o Italia -también afectados por aranceles trumpistas- podrían imitar a China. “Repsol ya tiene experiencia procesando Merey en su refinería de Cartagena. Si Bruselas aprueba excepciones al embargo, veríamos un terremoto geopolítico”, advierte.
Mientras tanto, en Houston, analistas de Rice University calculan que cada dólar que Venezuela recupere por exportaciones petroleras se dividirá así: 60 centavos para pagar deudas con China y Rusia, 30 para importar alimentos y medicinas, y apenas 10 para reinversión en pozos. Esta matemática cruel explica por qué, incluso con mayor demanda china, la recuperación de PDVSA seguirá siendo lenta y dolorosa.
Con información Banca y Negocios / pedroluisgimenezserrada@gmail.com / CNP: 21337