Dr. Alirio Figueroa Zavala: “La Importancia de la Actividad Petrolera en Venezuela”
El petróleo ha sido un protagonista constante en la historia de Venezuela, desde tiempos inmemoriales. Incluso los indígenas mencionaban los “menes”, manaderos de hidrocarburos, que los cronistas de indias describieron en los primeros años de la conquista. Sin embargo, la verdadera transformación de la industria petrolera venezolana comenzó en el siglo XIX.
Para la segunda mitad del siglo XIX, visionarios venezolanos establecieron una pequeña empresa de refinación de petróleo en el estado Táchira, a la que llamaron la “Petrolia del Táchira”. Este hecho histórico señala el inicio de la relación de Venezuela con el petróleo, que ha tenido un impacto profundo en la economía y la política del país.
Es esencial recordar que antes de la independencia de Venezuela, prevalecían las leyes de indias y las leyes de minería de España, que otorgaban a la Corona Española la propiedad de todas las minas. Sin embargo, en 1829, Simón Bolívar emitió el famoso “Decreto de Minería en Quito”, estableciendo que las minas pertenecían a la República y no a la Corona. Este decreto marcó el inicio del régimen moderno de propiedad minera en Venezuela.
Bolívar se inspiró en la legislación francesa sobre el régimen minero y reconoció que el control estatal era fundamental para garantizar la explotación racional de las minas y prevenir su agotamiento. Desde entonces, el Estado venezolano ha mantenido el control y la administración de las minas y, por supuesto, del petróleo.
Durante los primeros años de la explotación petrolera, bajo el gobierno de Juan Vicente Gómez, las compañías petroleras disfrutaron de ventajas significativas debido a las liberalidades otorgadas por el gobierno. El Estado carecía de recursos financieros y tecnología para la extracción y explotación petrolera, por lo que las compañías privadas asumieron esta responsabilidad. El Estado recibía regalías, pero ni siquiera se aplicaba un impuesto sobre la renta en ese momento.
En 1943, se aprobó una ley sobre el impuesto a las rentas, y ese mismo año, el Presidente Isaías Medina Angarita promulgó la Ley de Hidrocarburos, que estableció una regalía uniforme, reemplazando los diferentes tipos de regalías que pagaban las empresas petroleras.
A lo largo de esta relación entre el Estado y las empresas petroleras, la mayor reivindicación se centró en aumentar la participación del Estado en los ingresos petroleros, lográndolo a través del sistema de regalías y el incremento del impuesto sobre la renta. Este flujo de ingresos no dependía del capital ni del trabajo, sino del ejercicio del monopolio estatal sobre los recursos petroleros.
En resumen, la actividad petrolera ha sido una parte integral de la historia y el desarrollo económico de Venezuela, y su gestión ha sido fundamental para la transformación del país a lo largo de los años.
Dr. Alirio Figueroa Zavala / Individuo de número de la Academia de Ciencias Jurídicas del Estado Zulia.