EE.UU. mantiene alerta máxima de viaje a Venezuela tras liberación de ciudadanos
El Departamento de Estado advierte sobre alto riesgo de detenciones arbitrarias pese a liberación de 10 estadounidenses y tensiones con El Salvador.
A pesar de la reciente liberación de 10 ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela, el gobierno de Estados Unidos ha reiterado su alerta de viaje de nivel 4 para el país sudamericano, la clasificación más alta de advertencia. Esta medida responde a la persistente desconfianza hacia el sistema judicial y político venezolano, acusado de realizar detenciones arbitrarias con fines políticos o de negociación.
“Al 18 de julio, no hay estadounidenses detenidos injustamente en Venezuela. Sin embargo, el riesgo de nuevas detenciones sigue siendo extremadamente alto”, señaló el Departamento de Estado en un comunicado oficial, reafirmando que los ciudadanos norteamericanos no deben viajar a Venezuela bajo ninguna circunstancia.
La advertencia se emitió pocos días después de que el régimen de Nicolás Maduro liberara a los últimos 10 estadounidenses detenidos, como parte de un proceso de negociaciones diplomáticas. Simultáneamente, se produjo la excarcelación de 252 migrantes venezolanos recluidos en una cárcel de máxima seguridad en El Salvador, tras su deportación por parte de Estados Unidos meses atrás.
El presidente salvadoreño Nayib Bukele comentó en redes sociales: “El régimen de Maduro acaba de darse cuenta de que se quedó sin rehenes del país más poderoso del mundo”, sugiriendo que los estadounidenses habrían sido utilizados como fichas de negociación.
Tensiones con El Salvador y acusaciones cruzadas
La repatriación de los migrantes también desató una fuerte disputa diplomática. El régimen venezolano acusó a Bukele de intentar impedir la salida de uno de los aviones venezolanos desde el aeropuerto de San Salvador, alegando que incluso se bloquearon pistas de despegue. Según Caracas, el vuelo solo pudo partir tras la intervención directa del encargado de negocios estadounidense en Venezuela, John McNamara.
En respuesta, el fiscal general venezolano Tarek William Saab anunció una investigación penal contra Bukele y altos funcionarios salvadoreños, por supuestos delitos de tortura y tratos crueles contra los migrantes. Testimonios difundidos por medios oficialistas afirman que algunos venezolanos repatriados habrían sido víctimas de agresiones físicas, abusos sexuales y negligencia médica, e incluso se reporta que uno perdió un riñón tras fuertes golpizas.
Inseguridad jurídica y uso político de detenidos
La reiteración de esta alerta de viaje por parte de EE.UU. subraya la falta de garantías jurídicas en Venezuela, donde según organismos internacionales se ha consolidado un patrón de detenciones motivadas políticamente. Analistas coinciden en que esta medida no solo busca proteger a los ciudadanos estadounidenses, sino también presionar al régimen chavista para abandonar el uso de rehenes como herramientas diplomáticas.
Con información de El Nacional / pedroluisgimenezserrada@gmail.com / CNP: 21.337