Irán detiene violentamente a la Nobel de la Paz Narges Mohammadi durante homenaje a abogado fallecido
La activista iraní fue arrestada en Mashhad junto a Sepideh Gholian en medio de una nueva ola de represión, mientras participaba sin velo en una ceremonia de homenaje.
Las fuerzas de seguridad de Irán arrestaron este viernes de manera “violenta” a la activista y Premio Nobel de la Paz 2023, Narges Mohammadi, mientras participaba en una ceremonia en memoria del abogado Khosrow Alikordi, encontrado muerto la semana pasada en su oficina. La detención ocurrió en la ciudad de Mashhad, según informó su esposo, Taghi Rahmani, desde París.
Mohammadi, de 53 años, fue aprehendida junto a la reconocida activista Sepideh Gholian, en un acto que rápidamente generó preocupación internacional. La organización Human Rights Activists News Agency (Hrana) difundió imágenes que muestran a Mohammadi asistiendo al acto sin el velo islámico, un gesto que desafía directamente la normativa impuesta por el gobierno iraní.
Otros videos difundidos por medios iraníes en el extranjero muestran a la defensora de los derechos de las mujeres subiéndose a un vehículo, alentando a los presentes a corear consignas y manteniendo su postura desafiante pese a la constante vigilancia estatal.
Una vida marcada por el activismo y la represión
Mohammadi ha dedicado décadas a la defensa de los derechos humanos en Irán, lo que la ha llevado a ser detenida repetidamente por cargos relacionados con “propaganda contra el Estado” y “colusión contra la seguridad nacional”. Cuando recibió el Premio Nobel de la Paz en 2023, cumplía una condena de 13 años y nueve meses. Aunque obtuvo una breve licencia médica a finales de 2024, desde entonces había logrado permanecer fuera de prisión… hasta ahora.
El homenaje donde fue detenida estaba dedicado al abogado Khosrow Alikordi, conocido por asumir casos sensibles, incluidos los de detenidos durante la represión de las protestas de 2022. Su muerte, oficialmente atribuida a un ataque cardíaco, ha despertado sospechas debido a la intensificación de la represión en las últimas semanas.
El nuevo arresto de Mohammadi confirma el endurecimiento de la postura del gobierno iraní hacia las figuras disidentes, especialmente aquellas que mantienen una influencia internacional significativa. La comunidad global permanece atenta a su situación y a la creciente tensión en torno al activismo en Irán.
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